92 LOS TRES VIAJES DE JORGE JUAN A FERROL DE LA ILUSTRACIÓN. O BATIBURRILLO DAS ASOCIACIÓNS CULTURAIS DE FERROL

 

El año 1714 nació en Novelda (Alicante) Jorge Juan y Santacilia, ilustre marino y científico que dejó en Ferrol una indeleble huella ilustrada. Hijo de padres viudos y casados en segundas nupcias, huérfano de padre de niño, estudió en Zaragoza y Malta hasta su ingreso en la compañía de guardiamarinas de Cádiz el año 1729. Embarcado el año 1732 realizó varias campañas contra los berberiscos en la expedición contra Orán.

Reinando Felipe V, junto con el también guardiamarina Antonio de Ulloa, el año 1734 fue nombrado miembro de la comisión hispano-francesa encargada de la medición del meridiano en las cercanías del ecuador, para conocer el grado de achatamiento de la Tierra. Una serie de trabajos posteriores ampliaron su estancia en América hasta once años regresando a España el año 1745.

Jorge Juan y Antonio de Ulloa. Medición del meridiano

El año 1748 fue comisionado por el rey Fernando VI de forma secreta a Inglaterra donde estuvo estudiando los métodos de construcción naval en los astilleros británicos, regresando a España en Mayo de 1750 después de haber contratado a varios ingenieros y operarios ingleses.

Ascendido a Capitán de Navío, bajo la dirección del marqués de la Ensenada realizó una gran actividad, supervisando las obras de los arsenales de Ferrol, Cádiz y Cartagena y realizando numerosas obras civiles en territorio peninsular. Fue Capitán  de la Compañía de Guardiamarinas y fundador del Observatorio Astronómico de Cádiz, mientras escribía numerosos obras científicas y de construcción naval.

Miembro de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando y Caballero de la Orden de Malta, sus últimos destinos importantes fueron los de embajador extraordinario en Marruecos el año 1767 y Director del Real Seminario de Nobles el año 1770, falleciendo en Madrid el año 1773.  

Fue importante su presencia en Ferrol, teniendo una continua intervención en las obras de la ciudad y el Arsenal, pese al poco tiempo efectivo que permaneció. Fueron tres los viajes de Jorge Juan a Ferrol, los años 1751, 1753 y 1761, comisionado por los Secretarios de Marina e Indias, el marqués de la Ensenada y Julián de Arriaga.

Sala de Armas. Arsenal de Ferrol

En junio de 1751 realizó su primer viaje, supervisando los trabajos de construcción del Arsenal, modificando los planos de Cosme Álvarez, actuando sobre los muelles, los diques y los talleres de reparación de los diques, y redactando un proyecto del barrio de la Magdalena. En octubre de 1751 sufrió un serio accidente en A Graña, al romperse una jarcia de buques, cayendo al mar y resultando herido de cierta gravedad. Durante su convalecencia fue nombrado Capitán de la Real Compañía de Guardia Marinas, regresando a Madrid a principios del año 1752.

Fallecido Cosme älvarez en octubre de 1753, se trasladó de nuevo a Ferrol para dirigir las obras del Arsenal, auxiliado por el ingeniero Francisco Llobet. Planificó de forma definitiva el Arsenal, los diques de abrigo y de carenas, el muelle interior de La Cortina, la Sala de Armas, la Puerta del Parque, diversos almacenes y el foso defensivo que separa el Arsenal de la nueva ciudad.

Fue importante su actuación en la Sala de Armas, proyectada por Cosme Álvarez en 1747, siendo a partir de 1754 modificado su proyecto por Jorge Juan para adaptarlo a las nuevas funciones, cubriendo los tres patios previstos. Jorge Juan cesó en la dirección de las obras en abril de 1754, en que se trasladó a Cádiz y Cartagena, quedando en Ferrol su discípulo Sánchez Bort que, siguiendo sus planos, llevó a cabo las necesarias obras

En mayo de 1761 Jorge Juan viajó por tercera vez a Ferrol, para controlar las obras del Arsenal, efectuando la prueba de los diques secos, obra de Francisco Llobet, y supervisando del diseño definitivo del Arsenal, dirigido por Sánchez Bort, y la planificación del barrio de la Magdalena.

                                                     Jorge Juan. Capitanía General de Ferrol

Se encargó del planeamiento de la defensa del puerto, proyectando la cadena de cierre tendida entre los castillos de San Felipe y San Martín, y realizó un informe para el traslado de la Fábrica de Lonas y Jarcias desde Sada a Ferrol. En julio de 1762, después de sufrir dos serios episodios de parálisis en las manos, se trasladó a Alicante, dejando encargado a Sánchez Bort de las obras de Ferrol.

Además de numerosos informes y documentos, fueron muchas las publicaciones que escribió Jorge Juan, relativas a sus viajes, sus trabajos científicos, la construcción naval, la astronomía y la cartografía, como muestra de sus amplios conocimientos. Publicó varias obras junto con Antonio de Ulloa, referentes a su viaje de once años a América del Sur, dando cuenta de los trabajos realizados.

Importantes ediciones de época de sus obras se guardan en el Museo Naval de Ferrol: un “Compendio de Navegación para Guardiamarinas” (Madrid, 1757), un “Tratado de Mecánica aplicada a la construcción de buques” (Madrid, 1771), las “Observaciones astronómicas hechas en el Reino de Perú” (Madrid, 1753) y una “Relación histórica del viaje a América meridional” (Madrid, 1748), las dos últimas en colaboración con su compañero de viaje Antonio de Ulloa.

En Ferrol quedó el recuerdo de su estatua centrando los Jardines de Herrera y su retrato en el palacio de Capitanía General. La estatua fue erigida el año 1868 según un modelo en madera del escultor Vicente Loureiro, hoy en el Museo Naval de Madrid. La estatua se alza sobre un estanque octogonal decorado con cuatro tritones de bronce y un pedestal pétreo  decorado con escudos metálicos de España, Ferrol y la Marina, los tres rematados de la corona mural de la época republicana.

  
 

Obras de Jorge Juan. Biblioteca del Museo Naval de Ferrol

La elegante estatua de bronce de Jorge Juan, de corte neoclásico, vestido de chupa y casaca, señala con la mano derecha el Arsenal que diseñó y en la mano izquierda porta su obra Examen marítimo. El cuadro de Capitanía General muestra su retrato de medio cuerpo, con peluca, vestido de uniforme de gala y portando un libro en sus manos.

Estatua de Jorge Juan. Jardines de Herrera

El año 1992 se creó en Ferrol la Cátedra “Jorge Juan”, fruto de la colaboración del Ministerio de Defensa y la Universidad de A Coruña, una entidad de carácter cultural para el fomento de actividades relacionadas con la Navegación, la Construcción Naval, la Ingeniería, el Derecho y las Humanidades. Hoy se encuentra en franca decadencia.

Mientras que ninguna calle o plaza ferrolana lleva el nombre de “Jorge Juan”, llevaron su nombre dos buques de la Armada, aunque ninguno de ellos basado en Ferrol.  El primero, un destructor botado en Cartagena el año 1933. El segundo, otro destructor de la Marina de Estados Unidos, fue transferido a la Armada española el año 1960.

O batiburrillo das asociacións culturais de Ferrol

O desenvolvemento social e a expansión cultural son a causa da presenza de diferentes entidades e asociacións cidadáns en Ferrol. A lexislación vixente contempla asociacións recreativas (casinos, liceos), culturais (ateneos, círculos), artísticas (galerías, pintura, música), empresariais, profesionais (prensa), comunais (veciñais, parroquiais), sociais (benéficas, amas de casa) e outras variadas (foros, sociedades de amigos, naturalistas, deportivas).

No Rexistro Municipal de Ferrol atópanse inscritas máis de 400 asociacións, mesturadas de xeito indiscriminado nunha única lista. Semella necesario ordenar este amplo censo, favorecendo e coordinando as súas actividades, dando un pulo ao seu labor de “creadoras de opinión” e recoñecendo o seu importante papel como “interlocutores sociais”.

Hoxe en día, a maioría das asociacións culturais e sociedades recreativas de Ferrol están a pasar un mal momento, ao non ter lugar o necesario relevo xeracional, o que leva á parálise e monotonía de moitas delas, mesmo a súa desaparición, incidindo na evolución negativa da cidade que no aspecto cultural leva tempo sen concelleiros municipais que fagan algo de seu polo Patrimonio Cultural.

Espérase do Atónito Ferrolán que resolva o problema do seu patrimonio cultural e que as súas actividades, múltiples mais dispersas, levanten o seu ánimo; do Irreal Coro Toxos e Espiñas, que cese a súa costa abaixo, retomando a notable liña histórica anterior; de Fuco Buxaina e de Muiño dos Ventos, que esperten da atonía na que levan tempo instaladas. 

A Sociedad Artritica Ferrolana, asentada na compracencia, precisa certo revulsivo nas súas actividades. O Cansino Club de Petanca ultimamente asómase con máis frecuencia da habitual ás actividades culturais, aínda que de xeito errático. Do Club de Campo e Praia, case nada que sinalar ata de agora.

 

O amplo abano das sociedades culturais

Desapareceron certas entidades culturais que no pasado desenvolveron actividades de algún interese. Son os casos de Aulas na Corredoira, Liceo Morena Rubia, Centro de Estudios y Argalladas e Sociedad Monte Inclán, mentres non se teñen novas do que fai a cercana Asociación Cultural Cobanita. Dúas entidades que traballaron a prol do desenvolvemento  social e económico de Ferrol, levando a cabo interesantes traballos no eido cultural, a Fundición Ferrol Metropolitano e Tribunal para el Monólogo, tamén paralizaron as súas actividades.

Mentres que leva tempo desaparecida a notable revista Ecce Mono, o Club de Periodistas Intrépidos e a súa publicación FerrolParálisis tratan de recuperala súa presenza en asuntos de interese ferrolán, deixando de se perder en temas de fóra de Ferrol. Por outra banda, a Editorial Embroma e a Lateral Librera (quen sería o seu interiorista desta rolda) semella que comezan a tratar temas ferroláns de certo interese, mentres que o Museo da Destrución Civil, o Foro de Ferrol Redivivo, e o Club de Montañeros Trashumantes neste intre non ofrecen actividades de recoñecida enxunlla.

A Galería Sangradelos, unha entidade outrora aberta ás diferentes sensibilidades da cultura local, pechou as súas portas. A Obra Sociable de ABanca debería desenvolver actividades culturais que atinxan á cidade, como fixera nos seus comezos prometedores. O que chaman Centro Cultureiro Municipal. da rúa do Hospital, semella que volve a casa por Nadal, lembrando de cando en vez aos artistas locais, presentando en pequenas doses algunha entrega das obras do seu descoidado e agachado Panteón de Pintura Ferrolá.  

 Mentres non temos nada que dicir de La Voz de su Amo e semella desaparecida en combate Acotaciones de un ferroleño, outras publicacións de Ferrol, ben sexan de papel ou anden polo aire, como o Dominical Maruxía ou a Galicia Dixital dos Ártabros, ultimamente moi irregular nas súas entregas, seguen nas nubes. Tamén as moitas Asociacións de Veciños e Venideiros, as veces máis abondosas en Ferrol que as terrazas dos cafés, chegan sempre tarde a todo, aínda que algunha delas, como a da Magdalena, semella traballar con certo interese no eido da cultura.

Tódalas devanditas entidades e asociacións teñen uns Presidentes que deberían chamarse Bodas e Bautizos polo nulo traballo cultural que desenvolven, mentres que os que mandan de verdade nelas, os seus Secretarios e Secretarias, deberían  levar o axeitado nome de Comisarios Políticos polas actividades que normalmente exercen na sombra. Non damos os nomes que todo o mundo coñece. 

Unha vez que rematou a estúpida costume ianqui do “Black Friday”, pódese facer un pequeno apuntamento final. Ferrol necesita unha publicación periódica que informe dos actos culturais a celebrar na cidade. Neste intre soamente unha pequena revista mensual titulada (deberíase chamar AY), cunha insubstancial redacción, é o único canal para coñecer un pouquiño o que ocorre no mundo cultural ferrolán.  

Paisaje Otoñal

Jardines de la calle Santos. Esto es lo que sucede cuando no se podan los árboles en su momento y luego no se recogen las hojas caidas.

 

Jardines de la calle Santos

 

 

91. DE FERROL, UN LIBRO ABERTO (ANO 2005) A FERROL E OS LIBROS (ANO 2020) LOS TRANVÍAS DE FERROL

 

 

 Exposición “Ferrol, un libro aberto”

O ano 2005 o Real Coro Toxos e Froles e a Fundación Ferrol Metrópoli organizaron a exposición bibliográfica “Ferrol, un libro aberto” no sala de exposicións do novo local do Real Coro, con motivo da celebración do Día das Letras Galegas 2005. Este ano 2021 ven de celebrarse unha nova exposición bibliográfica “Ferrol e os libros”, organizada polo Concello de Ferrol na Biblioteca Municipal da cidade.

                                                     Ferrol, un libro aberto. Ano 2005

Na primeira das anteditas exposicións, inaugurada polo Alcalde de Ferrol, Juan Juncal,  presentáronse una serie de publicacións que aportaron diversas entidades e asociacións culturais da cidade como o Ateneo Ferrolán, Central Librera, Centro Ártabro de Estudios, Club de Prensa, Galería Sargadelos, Librería del Campus, Liceo Rubia Barcia,  S.A.F. e a Sociedad Valle Inclán.

As obras presentadas eran de autores ferroláns o trataban de temas da nosa cidade. Na publicación editada en maio de 2005 e coordinada por Juan J. Burgoa, varios estudosos/as da bibliografía ferrolá, desde Esperanza Piñeiro e Eva Ocampo a Guillermo Llorca e Xosé Leira, percorrían variados aspectos do libro da nosa cidade. O caderno remataba cunha ampla escolma dos poetas ferroláns, con poemas da autoría desde Fernán Esquío ata Xohana Torres.

 

 

Concepción Arenal                                   Aurelio Ribalta 
                     
Exposición “Ferrol e os libros”

No mes de outubro deste ano 2021 inaugurouse no terceiro andar da Biblioteca Municipal unha nova e interesante exposición bibliográfica dedicada ao mundo da edición en Ferrol. Baixo a dirección de Carmen Porta e a coordinación de Marbella Méndez ten por obxecto achegar ao público as imprentas, as editoriais, os títulos e os contidos da produción de libros en Ferrol.

O sinxelo caderno da exposición salienta o feito que desde que se instalou a primeira imprenta de Lorenzo José Riesgo en Ferrol, editando o ano 1804 a obra “Descripción Económica del Reyno de Galicia” da autoría do ilustrado ferrolán José Lucas Labrada, tivo unha grande importancia a Armada na produción editorial, especialmente no que atinxe aos libros de carácter técnico e as obras  de formación relacionadas coa Mariña e a construción naval.

Ferrol e os libros. Ano 2021

Colocados en oito amplos estantes, a exposición bibliográfica da Biblioteca Municipal presenta case 100 obras dos seus fondos propios, dando a coñecer o traballo realizado, ademais da citada imprenta Riesgo, por outras coñecidas firmas ferroláns como as de Luciano Taxonera, Mariano Albizanda, El Correo Gallego, Emilio Paramés, El Eco Ferrolano, Ricardo Pita, Viuda de Montero, Lombardero e Covadonga, entre outras empresas e entidades editoras de libros.

De xeito indepente,  empregando un estante específico para mostrar as súas obras, faise un especial fincapé na presenza en Ferrol da recoñecida editorial Céltiga, que foi creada o ano 1921 polas Irmandades da Fala co obxecto de editar publicacións en lingua galega, especialmente obras narrativas e de teatro, para compensala que consideraban relativamente abundante produción de poesía. A colección dirixida por Xaime Quintanilla, foi editada  pola imprenta e tipografía ferrolá El Correo Gallego, sita na rúa Real número 139-141, sendo o xerente da editorial Ramón Villar Ponte .


                                                               Imprenta L.J. Riego. Ano 1804

Nos seus 16 números que publicou ata o ano 1923, cunha tirada media de 3000 exemplares, colaboraron os autores máis representativos da lingua e a cultura galega. A editorial comezou a súa andaina publicando tres obras de teatro: Alén de Xaime Quintanilla, Mal de moitos e Trato a cegas de Charlón e Hermida, e Trebón de Armando Cotarelo. Seguiron os relatos Un ollo de vidrio de Alfonso R. Castelao, Saudade de Xaime Quintanilla, O novo xuez de López Abente, A i-alma de Mingos de Francisca Herrera, A custureira de García Pereira, Semprenoiva de Cabo Pastor e A Santa Compaña de Nóvoa Santos.

Estante da editorial Céltiga

Despois da publicación de dúas series de contos de Euxenio Montes e de Correa Calderón, editáronse a lenda irlandesa Os catro cisnes brancos, traducida por Manuel Fernández Barreiro, a obra de teatro Almas mortas de Antón Vilar Ponte, dous novos parrafeos de Charlón e Hermida, e a colección de poemas Raza e terra de Eladio Rodríguez González. Os libros publicados levaban as portadas ilustradas por artistas da talla de Alfonso R. Castelao, Díaz Baliño, Imeldo Corral ou Bello Piñeiro.

     

 

Autores ferroláns: Cabo Pastor y García Pereira

Dúas observacións encol desta interesante exposición. Aínda que se mostran unhas cen obras sobre a nosa cidade, a exposición cecais queda algo curta, ocupando tan só a metade da sala de exposicións da Biblioteca Municipal. Tamén carece do axeitado catálogo para información e lembranza dos visitantes, por certo un mal endémico das exposicións presentadas ultimamente en Ferrol, tanto polo Concello como por outras entidades.

El tranvía eléctrico de Ferrol

Continuando con las exposiciones, en el Museo de la Construcción Naval se ha podido contemplar otra notable exposición dedicada al tranvía de Ferrol. A lo largo de una serie de litografías, el artista ferrolano Julio Ferrín expone los 26 originales de sus dibujos a plumilla mostrando el tranvía en diversos lugares de su recorrido de casi 12 kms desde Neda al Muelle de Ferrol.

La empresa “Tranvías de Ferrol” se constituyó el año 1914, con su proyecto que recorría la Carretera de Castilla dividido en tres líneas o tramos. La primera línea, desde la Puerta Nueva de Ferrol hasta el Portazgo de Jubia, inició su recorrido el año 1924. En el año 1932 se incorporaron los trayectos entre el Portazgo de Jubia y Neda, y entre la Puerta Nueva y el Muelle de Ferrol.

 


El tranvía de Ferrol. Año 1950

El funcionamiento de los tranvías ferrolanos se extendió desde el 28 de agosto de 1924 hasta el 3 de julio de 1961, fecha en la que entró en las Cocheras de Narón el último tranvía, siendo reemplazados sus servicios por las rutas de autobuses que habían iniciado su andadura en enero de 1960. 

Es de lamentar que una exposición de estas interesantes características, como está ocurriendo con la mayoría de las exposiciones celebradas últimamente en la Ciudad Ensimismada, carezca de un catálogo ilustrado para el visitante, que hubiese podido patrocinar el propio Museo de la Construcción Naval, el Concello de Ferrol o alguna entidad cultural de la ciudad.

 


Tranvía eléctrico entrando en Cocheras. Año 1945

Historias para no dormir. O Cú da Raiña

Cuando en abril del año 1690 la reina Mariana de Neoburgo, casada por poderes con el rey Carlos II de España, se dirigía en barco desde Inglaterra hacia el puerto de A Coruña, a causa del mal tiempo se vio obligada a entrar en la ría de Ferrol. Teniendo que desembarcar en un pequeño islote rocoso frente a Mugardos, la reina Mariana se cayó y dio con el culo en tierra. Por esa razón el islote es conocido como “O Cú da Raiña”. 


                                                                Islote O Cú da Raíña

 

90 LA CIUDAD ENSIMISMADA. LOS SÍMBOLOS Y ESLÓGANES DE FERROL. COMELLADAS Y MERENDOLAS

La bandera y el escudo de Ferrol

Durante la sesión municipal celebrada el 22 de Junio de 1778, el Concello de Ferrol acordó abrir el timbre heráldico de la villa, declarando que su escudo de armas o blasón municipal consistía en una torre almenada, colocada sobre una restinga marítima y rematada de un farol, llevando un cañón y un ancla a cada lado. Dentro de la simbología de los elementos heráldicos, la torre con farol representa la ciudad portuaria, las piezas artilleras son el símbolo de la plaza fuerte y las anclas recuerdan a la ciudad naval. Aunque se trata de una villa de fundación real, es corriente que el escudo se timbre con una corona marquesal.  

La bandera de la ciudad de Ferrol, como pasa con las localidades costeras, tiene un origen marítimo. Los buques de estas ciudades debían izar en el tope de su palo mayor la bandera que indicase la matrícula marítima que les pertenecía, según una Orden de 10 de julio de 1845. El pabellón correspondiente a Ferrol quedó establecido como una bandera ajedrezada, a base de veinte cuadrículas que alternan los colores blanco y azul.

Bandera y escudo de Ferrol 

  El Racing Club de Ferrol fue fundado el año 1919. Su escudo lleva en su parte superior la bandera de Ferrol, incorporando desde el año 1939 la Cruz de Santiago, con motivo de haberse proclamado campeón de Galicia. Junto con el Real Club Celta de Vigo son los únicos equipos de la Comunidad de Galicia que incorporan la Cruz de Santiago.

 


                                                                 Escudo del Racing Club de Ferrol

La promoción del Patrimonio Cultural

Hoy en día se considera que la puesta en valor del Patrimonio Cultural y el fomento de los programas de Ocio y Cultura, son factores para el desarrollo social y económico de las ciudades, dado el cada vez mayor número de visitantes que reciben. El aumento de tiempo libre, la mejora de la educación, la mayor esperanza de vida, la globalización de la cultura y el progreso de las comunicaciones, son factores de desarrollo de los pueblos, generando riqueza y creando puestos de trabajo.

Para el fomento del creciente turismo cultural las ciudades deben buscar sus señas de identidad, conjugando de forma inteligente tradición y modernidad. Ferrol, ciudad nacida el siglo XVIII de una decisión de la Corona, tiene como identidad propia la Ilustración, época que dejó en la urbe un notable Patrimonio en los campos del Urbanismo, la Ingeniería y el Arte.

A este legado Ferrol debe añadir las obras del Modernismo, que desde principios del siglo XX se integraron ejemplarmente en el barrio de la Magdalena, dando un valor añadido al clasicismo ferrolano. Debe también ponerse en valor el Patrimonio Natural, tanto su abrigada ría como sus numerosas playas abiertas a las aguas atlánticas. No hablamos del Camino Inglés porque el Concello de Ferrol quizás no sepa de qué va, al contrario de los otros 18 municipios recorridos por la ruta jacobea.

Dentro del Patrimonio Inmaterial son notables en Ferrol su conocida Semana Santa, la más importante de Galicia, y la Fiesta de San José, donde las rondallas, fruto de una tradición de los trabajadores del arsenal ferrolano, recorren las calles festejando a la mujer. No se puede decir lo mismo de las Fiestas de Verano, herederas de las afamadas Fiestas del Marqués de Amboage, últimamente en plenas rebajas veraniegas.

Los eslóganes publicitarios de la ciudad

Antes de aparecer escrito en documentos históricos el nombre de Ferrol, diversos historiadores, sin una precisa apoyatura documental, informan de una oscura y antigua tradición, perdida en la noche de los tiempos, en el sentido de que la ciudad fue fundada durante el siglo V, coincidiendo con la entrada de los suevos en Galicia, siendo conocido en esa época como Puerto del Sol.


                                                                 Blasón del apellido Ferrol

El astro rey estuvo siempre presente en el imaginario popular ferrolano, tanto en las canciones y refranes como en las leyendas y tradiciones de los vecinos. Precisamente en el blasón heráldico del viejo apellido Ferrol luce como motivo principal un radiante sol, que acaso podría ser el mismo que representa las armas del primitivo escudo de la villa de Ferrol, coincidiendo con lo escrito por el Licenciado Molina en los versos de su obra Descripción del Reino de Galicia y de las cosas notables del, publicada en Mondoñedo el año 1550. En el Folio XXX. De los puertos de mar, escribe:

 

Luego tras de esto, vereis a Ferrol,

puerto estremado, que a todos ha popa,

pues puede afirmarse que en toda la Europa,

podemos a este pintalle por sol.

Durante la época de la Ilustración volvió a insistir en el nombre de Puerto del Sol, como antiguo nombre de la ciudad, un singular viajero: el Cura de Fruime, Diego de Zernadas y Castro. A fines del siglo XVIII, tras su visita a los Astilleros de Ferrol, compuso una curiosa oda poética titulada Real de Esteyro, a la que denominó “poema heroyco joco-serio” y que dedicó a Josefa Cayetana y Pardo, marquesa de San Saturnino, cantando las excelencias del puerto de Ferrol. En una de sus estrofas dice:

 

Por el Puerto del Sol fue conocido

el seno del Ferrol antiguamente,

título, que, sin duda, ha merecido

por ser vuestro palacio transparente.

Otros autores de los siglos XIX y XX como Leandro de Saralegui y Fernández o Enrique Chao Espina aluden en sus composiciones al sol y su relación con Ferrol, recordando aquella canción popular de las rondallas de principios del siglo XX que dice:

 

                                     Ferrol, Ferrol, Ferrol, 

                                     donde yo nací 

                                     bajo un ardiente sol.

Cumple también recordar la letra del curioso y olvidado Himno de Ferrol, compuesto el año 1931 con letra del profesor Manuel Masdías y música de Felix Alonso. A lo largo del mismo se hacen varias referencias al sol en sus estrofas:

Ferrol,                                       Yo quiero cantar

hermosa ciudad                      tu gran hermosura

de tanta beldad                       en un ancho rayo ……

que la envidia el sol ……         un rayo de sol.


Todas estas referencias heráldicas, literarias e históricas son una muestra de la permanente relación mantenida por la ciudad de Ferrol con el Sol, nuestro astro rey, y el continuo afán del pueblo ferrolano de que ese Sol, fuente de vida, brille y de lustre a la urbe, expresando muchas veces más y mejor un deseo que una realidad. Muchos recuerdan el antiguo dicho popular “Cuando llueve y hace sol, andan las meigas por Ferrol”. (en su versión galega, “anda o demo”)

 

Ferrol, cuando llueve y hace sol

Ferrol no ha tenido mucha suerte en la elección de sus eslóganes turísticos, fruto de la imaginación de unos sesudos personajes municipales. Primero fue una idea peregrina de los años 1960 del pasado siglo, el inefable “Ferrol tiene playas, marisco y sol”. Le siguió aquel de “Ferrol, a cidade da mar”, eslogan totalmente inadecuado para una urbe que está aislada por rejas y murallas, física y mentalmente, de las aguas de su ría. Más tarde se trató de poner en valor “Ferrol, paraíso natural” (o acaso debería decir “paraíso del gas natural” ¿).


Playas, mariscos y sol. A Cidade da Mar

De esa forma siguieron diversos eslóganes, a cual menos apropiado. Creemos que el anodino Ayuntamiento ferrolano debería regresar al simpático eslogan de “Ferrol. Patrimonio de la Eternidad” y la inoperante Autoridad Portuaria podría volver al suyo de “Ferrol. Apeadero para Santiago”. Aunque a la vista de todo lo anterior, quizás el más acertado fuese el que últimamente inunda las paredes de viviendas de la ciudad: “Ferrol Mola.

Ferrol Mola

  La propuesta de Ciudad Ensimismada

 Ferrol, la urbe gallega con más terrazas por km2 de calle peatonal y el mayor número de asociaciones vecinales por barrio, por diversas razones es hoy una ciudad adormecida y ensimismada, caracterizada de siempre por una complicada estructura social, con unas relaciones que vienen oscilando entre la influencia de la Armada y la variable solidez laboral de Navantia. Posiblemente hoy el eslogan que hoy le puede corresponder por ser el que mejor define a la ciudad actual y que propone este Foro de Amigos de Ferrol (F.A.F.) es el de “Ferrol. La Ciudad Ensimismada”.

 


                                                                Ferrol. La Ciudad Ensimismada

 Una comellada y una merendola

El pasado año 2015 el inefable periódico coruñés “La Voz de Galicia” publicó en sus páginas de Ferrol una fotografía titulada “La comida de los almirantes”. Con el ex alcalde Manuel Couce Pereiro de anfitrión se incluía y citaba a una serie de personajes de Ferrol, más o menos importantes, que se reunían todos los años en una conocida casa de comidas  de la carretera de Catabois para “discutir y arreglar los problemas de la ciudad”. Entre estos personajes, además de los almirantes Torrente,  Portal y Miguel A. Fernández, se encontraban Isidoro Silveira, José L Aulet, Ramón Veloso, Manuel Criado, Manuel Molíns y otros.

                                               Noticia remitida y NO publicada

Con este motivo, un colaborador de este Foro de Amigos de Ferrol remitió la nota adjunta el citado año 2015 para su publicación en “Diario de Ferrol”, para informar que, como contraste a esta importante comellada de almirantes, se celebraba en una cafetería local una merendola de simples jubilados, que solo pretendían tomar juntos un café con galletas en una Ciudad Ensimismada que no tiene arreglo. Esta nota no logró ser publicada por el periódico local.

 

 

89 LA CIUDAD DE FERROL. LAS PLAZAS URBANAS. IDEAS Y OCURRENCIAS: LAS FASES DE UN PROYECTO

 

Las plazas urbanas siempre fueron el lugar de encuentro y de reunión de ciudadanos, sin distinción de origen, posición social o ideología, siendo, como espacios públicos, la esencia de la urbe. La plaza es el lugar donde se levantan los edificios más representativos, convirtiéndose en símbolos del poder, sea político, militar o religioso.

La época de la Ilustración favorece la creación de lugares como parques urbanos y alamedas. En el siglo XX estos espacios se adecúan al ocio, instalando palcos de música y quioscos. En el siglo XXI las plazas urbanas deben conserven su memoria histórica y seguir siendo el lugar privilegiado donde late el corazón de la ciudad.

Las plazas de la Ciudad de la Ilustración

   Plaza de Armas. Año 1905

En Ferrol, las dos plazas del barrio de la Magdalena, Armas y Dolores (hoy Amboage), se encuadran como centros bipolares del espacio urbano. La plaza de Armas llevó los nombres de Churruca por la fuente monumental allí emplazada, del Carmen por la capilla levantada a principios del siglo XIX en un lateral y del Marqués de Alborán. Durante muchos años sirvió para acoger el mercado de leña y otros puestos públicos.

El año 1953 se construyó el edificio del Ayuntamiento, considerada una obra encuadrada dentro de la arquitectura clasicista surgida tras la Guerra Civil. Recientemente se procedió a una reforma integral de la plaza. La extraña reforma incluyó la instalación de un suelo arenoso y la plantación de tilos holandeses. El tiempo es testigo de la escasa utilidad de este nuevo planteamiento de la plaza.

La plaza de Amboage debe el nombre de plaza de Dolores a la iglesia de la Virgen de ese nombre levantada a partir del año 1796. En su parte norte conserva el edificio multiusos que durante muchos años fue el Hospicio Municipal. El año 1896 se erigió la estatua del marqués de Amboage, que centra y da nombre actual a la plaza.

Con su espacio de juegos infantiles, variados jardines y arbolado en su periferia, quizás sea la plaza de Ferrol menos agredida, la más frecuentada y la que mejor conserva las esencias de la ciudad, aunque se encuentra afectada por las amplias terrazas de las cafeterías, que impiden el adecuado uso ciudadano de la plaza y sus bancos.

Inauguración de la estatua del marqués de Amboage. Año 1896

En cuanto a la plaza de España hay que hablar de los experimentos llevados a cabo en la llamada Puerta Nueva, construida como entrada a la ciudad el año 1812. El destrozado espacio de lo que era un lugar logrado y significado de entrada a Ferrol, constituye un ejemplo de deconstrucción urbana y de fracaso municipal.

Plaza de España. Año 1960

La plaza, inaugurada el año 1953,  tras la retirada de la estatua de Franco el año 2002, sufrió las ocurrencias de cuatro corporaciones municipales, que destrozaron un espacio de 20.000 m2, después de gastar veinte millones de euros para. Se construyó un túnel absurdo y retorcido, previendo un edificio de veinte metros de altura y un gimnasio subterráneo, creando un lugar inhóspito que llevó al cierre de los comercios de la zona.

Prácticamente han desaparecido la plaza de Capitanía y la plaza del Callao, nacidas como lugares de paso y nexo de unión del centro histórico de la Magdalena con otros barrios de la urbe. Hoy se han transformado en simples lugares de circulación y aparcamiento de vehículos.

Las fotografías antiguas muestran ambas plazas a finales del siglo XIX, En la primera aparece el antiguo edificio de Capitanía General y enfrente las desaparecidas casas porticadas de Salomón. La segunda, con el convento de la Enseñanza al fondo, muestra el montaje inicial en dicha plaza de la estatua del almirante Méndez Núñez.

 

Plaza de Capitanía. Plaza del Callao. Principios del siglo XX

Las plazas de los barrios de Ferrol

La Plaza Vieja, llamada plaza del Marqués de San Saturnino, se encuentra en Ferrol Vello, el barrio más antiguo de la ciudad, justo enfrente a la Puerta del Parque, la Fuente de la Fama y la antigua Sala de Armas. Se trata de una plaza amplia, rodeada de bancos y sombreada por castaños de Indias, aunque de mantenimiento descuidado.

Plaza Vieja. Año 1920

Sus viviendas disfrutan de las típicas galerías de la época de la Ilustración, aunque derruidos y en mal estado. En ella se encontraba Puerta del Cristo, destruida el año 1826, y la Fuente Wallace, trasladada el Parque Municipal. Desde el siglo XVI, el tercer domingo de mes se celebra una feria tradicional, extendida a la calle Irmandiños.

 La plaza de Canido tiene origen desde tiempo inmemorial en un cruce de caminos del barrio alto, siendo de gran interés el crucero que preside la plaza como símbolo del barrio a través del tiempo. Del primer crucero de la plaza se escribe que fue bendecido, en presencia del conde Fernán Pérez de Andrade, el 3 de mayo del año 1387, festividad de la Invención de la Santa Cruz, de celebración tradicional en el barrio de Canido.

Plaza de Canido. Bendición del crucero, año 1909

Varios ejemplares de la plaza fueron derribados y alzados de nuevo, uno de ellos diseñado por Rodolfo Ucha el año 1909. El año 1938 fue bendecido el actual crucero, una obra vistosa y de buen porte, con imágenes de Cristo y la Virgen de la Piedad, que se continúa adornando con motivos florales en la tradicional celebración de los Mayos, unas fiestas profanas, cíclicas, agrarias y estacionales que saludan la llegada de la Primavera.

 Otras plazas de la ciudad

Las siguientes ilustraciones muestran cómo se podían ver tres plazas urbanas de Ferrol a principios del siglo XIX: la Plaza de las Angustias, la plaza de San Roque y la plaza de Sánchez de Aguilera. Actualmente estas plazas se encuentran totalmente reformadas o modificadas.

La plaza de las Angustias era otra de las plazas históricas de Ferrol. Antesala que fue de entrada a un barrio desaparecido como tal, estuvo plantada de álamos el siglo XVIII. Hoy conserva en su extremo oriental la iglesia de la Virgen de las Angustias, construida el año 1788, habiéndose convertido la antigua plaza en un lugar de circulación y aparcamiento de vehículos. 

Plazas de las Angustias, San Roque y Sánchez de Aguilera. Inicio del siglo XX

La plaza de San Roque, históricamente conocida como Campo de San Roque, delimita la zona que une los barrios de la Magdalena y Ferrol Vello. Debe su nombre a la capilla de San Roque perteneciente al Gremio de Mareantes, que fue parroquia a mediados del siglo XVIII, siendo muy concurrida una romería celebrada en honor del santo. 

La plaza de Sánchez de Aguilera, situada frente al antiguo Hospital de Caridad, es una recogida plaza, dotada de césped, setos y pequeños árboles. Preside su centro el busto de mármol de Dionisio Sánchez de Aguilera, colocado de origen sobre una hermosa fuente a modo de pedestal, fuente hoy desaparecida, lo que desmerece la obra.

Continuamos por la histórica plaza de Ferrándiz, hoy prácticamente desaparecida; la antigua y recogida plaza de la Tahona en Canido, donde estuvo el Cristo de ese nombre; la plaza de la Constitución, con un bonito quiosco de música; la escondida plaza de Sevilla; las ajardinadas plazas de San Francisco y Herrera, hoy descuidadas; la amplia y transformada plaza del Inferniño; la arbolada plaza de Ultramar; y la plaza de la Puerta de Canido, convertida en una rotonda de confusa circulación rodada.

Actual Plaza de FENYA. Calle Alegre

Cumple recordar una amplia plaza de reciente creación situada en una urbanización de la calle Alegre, conocida como Plaza de FENYA, por haberse encontrado allí la vieja fábrica ferrolana, cuando pudo habérsela bautizada con el nombre de la poetisa Xohana Torres, ferrolana de adopción, que vivió mucho años en el barrio de Canido.

Se trata de una plaza dotada de buenos equipamientos, una abundante dotación de bancos para el descanso y una zona de juegos infantiles, pero es el clásico ejemplo de plantación de numerosos árboles de hoja caduca, totalmente carentes del debido cuidado de una poda anual para su necesario mantenimiento.

 

 Los buenos y malos usos del patio del Centro Cultural Municipal

   
 

                                   Cristo de la Tahona                         Exposición de arte Cubista

                             Concejal Bonifacio Borreiros                 Concejal desconocido

  

Las fases de un proyecto

De siempre se ha considerado que durante la gestión de un proyecto de cierta entidad tenían que cumplirse una serie de etapas, que podían resumirse en: antecedentes, consideraciones, conclusiones y proyectos. Sin embargo con el tiempo se ha comprobado que esta sencilla regla se iba transformando en algo más complejo.

 

Proyecto de tres puentes entre Ferrol y Coruña

En este aspecto, el Foro de Amigos de Ferrol (F.A.F.) ha comprobado que en la mayoría de proyectos y trabajos en los que participan los poderes públicos, y a veces las empresas privadas, realmente se van cumpliendo de forma inexorable una serie de diez diferentes fases del proyecto.

Fases de obligado cumplimiento en un proyecto

 

1 Optimismo inicial                       

2 Desorientación completa

3 Relajamiento total                    

4 Cachondeo  generalizado

5 Búsqueda implacable de culpables

6 Sálvese quien pueda                  

7 Castigo ejemplar a inocentes

8 Recuperación del optimismo perdido

9 Terminación inexplicable del proyecto

10 Premios y condecoraciones a los no participantes